La anunciada salida del ex presidente hondureño Manuel Zelaya a México quedó truncada anoche mismo, pues éste quería irse al país azteca en calidad de “
huésped distinguido” y no como asilado político, como previamente se informó a la Cancillería de Honduras
El canciller Carlos López Contreras explicó que “
se le denegó el salvoconducto de salida a Zelaya porque era improcedente”.
Fuentes diplomáticas confirmaron que personal de la embajada mexicana en Tegucigalpa entabló contactos con asesores cercanos a Zelaya para negociar condiciones bajo las cuales Zelaya podría visitar México.
Ya tenía agendaSegún reportes periodísticos, la intención de Zelaya era pasar unos días en la capital mexicana y luego partir a Cuba para participar en la Cumbre de la Alba a realizarse el próximo 14 de diciembre en La Habana.
En la capital mexicana se tenía previsto que se reuniera con Calderón hoy jueves por la mañana en un evento que no implicaría desconocimiento de las elecciones presidenciales de Honduras, en las que resultó electo Porfirio Lobo, declararon fuentes mexicanas.
Según reportes de prensa, un avión mexicano tenía planeado llegar a la base aérea Hernán Acosta Mejía para trasladar a Zelaya y a su familia a la capital azteca.
Cuando los medios de comunicación daban como un hecho la salida de Zelaya del país como asilado, el ex ministro de la Presidencia Enrique Flores Lanza manifestó en Telesur que la intención del ex Presidente era abandonar la sede diplomática como huésped ilustre y no como refugiado político.
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Pasaría rumbo a México sin pedir ningún tipo de salvoconducto”, indicó Lanza.
El ex funcionario detalló que Zelaya no estaba dispuesto a salir de Honduras bajo la figura de un salvoconducto, pues “
él es el Presidente constitucional de Honduras y no puede salir de esa manera”.
Flores Lanza agregó que Zelaya “
saldría con su esposa Xiomara Castro y dos de sus hijos. Él continurá con la lucha, no defraudará al pueblo hondureño”.
Según Flores, entre los planes que tiene Zelaya se encuentra “
continuar con la ofensiva diplomática para que los países del mundo desconozcan el gobierno de Roberto Micheletti que se instaló en Honduras desde el pasado 28 de junio".
Luego de instalarse en México, Mel tenía planeado viajar hasta La Habana para participar en la Cumbre de la Alianza Bolivariana para los pueblos de América, Alba.
No acepta asilo“
Sigo firme como los robles y pinos de Olancho", dijo anoche Manuel Zelaya. El depuesto Presidente manifestó: “
No tengo la menor intención de renunciar a mi cargo, ni abandonar la lucha. Por ahora no tengo ningún salvoconducto. Hay un interés de dialogar, de buscar una salida y consideramos que cualquier esfuerzo que se haga en procura de la paz y de un ambiente fraterno se debería hacer".
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No estoy cerrado a esta propuesta, pero se debe actuar con responsabilidad”, dijo Zelaya.
El ex mandatario aseguró que recibió llamadas importantes como la de Leonel Fernández de República Dominicana, quien habló de la posibilidad de tener una reunión con Porfirio Lobo allá en Dominicana.
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Eso puede ser una concertación, pero no es un asilo. En iguales términos hablé con el Presidente de México. Se están buscando salidas, pero no salidas de asilo” apuntó.
Zelaya dijo a sus amigos que “
no tengo ningún documento de salida y agradezco la solidaridad”.
ImprocedenteEl canciller Carlos López Contreras confirmó anoche que el Gobierno de México solicitó un salvoconducto para que Manuel Zelaya saliera del país con carácter de asilado, incluso bajo esa premisa salió un avión de México para que recogiera al ex Presidente en Tegucigalpa y lo llevara a ese país.
Sin embargo, según el canciller, a la hora de presentar el documento formal por parte de la embajada de México a la Cancillería hondureña el mismo fue rechazado por improcedente, pues no llenaba los requisitos jurídicos que exige el Gobierno hondureño para autorizar un salvoconducto.
El canciller dijo que el Gobierno deja abierta la posibilidad de otorgar un salvoconducto de salida de Zelaya siempre y cuando cumpla con los preceptos jurídicos del derecho de asilo suscrito por Honduras con los demás países americanos.
Otro de los factores para negar el salvoconducto a Zelaya fue que ellos lo solicitaron también para su esposa y dos de sus hijos y el Gobierno hondureño sólo se lo otorgaría al ex Presidente, pues su familia goza en Honduras de todas las prerrogativas constitucionales y pueden salir y entrar cuando quieran.
El canciller confirmó que fue Zelaya el que solicitó a la embajada de México en Tegucigalpa que a su vez pidiera al Gobierno de Honduras la autorización de un salvoconducto para él y su familia; pero como el trámite se hizo a las seis y media de la tarde eso impidió que hubiera el suficiente tiempo para analizar en detalle la pretensión del ex mandatario. “
Pero como verbalmente se había logrado un acuerdo de salvoconducto en carácter de asilado político en favor del ex Presidente, la embajada mexicana presentó el escrito sin llenar las condiciones jurídicas exigidas por el Gobierno hondureño y por eso la solicitud fue rechazada".
Contreras se negó a dar detalles de esas inconsistencias legales en el marco del derecho de asilo aceptado por Honduras y suscrito con la mayoría de países latinos porque dijo que “
esa problemática queda en el marco de la relación bilateral entre nuestro país y México”.
Confirmó que el avión mexicano fue desviado a El Salvador cuando se oficializó la negativa de la Cancillería hondureña de otorgar un salvoconducto en los términos presentados por los representantes diplomáticos mexicanos.
Rompe ortodoxiaEl abogado Oswaldo Ramos Soto dijo que el caso de Manuel Zelaya rompe con la ortodoxia del derecho de asilo por dos razones.
Primero porque el derecho de asilo lo pide en condiciones normales una persona que demuestra a una embajada extranjera que es un perseguido político; pero Zelaya vino de un país extranjero a una embajada que lo aceptó como huésped y esa figura no existe en el derecho de asilo. El otro elemento es el hecho de que Zelaya se refugió en una embajada sin embajador porque en ese momento Brasil ya había retirado su representante de Honduras.
A favorEn la capital mexicana, se tenía previsto que Zelaya se reuniera con Calderón hoy jueves por la mañana en un evento que no implicaría desconocimiento de las elecciones de Honduras.
De México partiría a Cuba para participar en la Cumbre del ALBA a realizarse el próximo 14 de diciembre en La Habana.
Entre los planes de Zelaya se encuentra "
continuar con la ofensiva diplomática para que los países del mundo desconozcan el gobierno de Micheletti".
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El asilo es una institución de carácter humanitario": ex canciller Pérez Cadalso
El ex canciller Guillermo Pérez Cadalso dijo que "
el asilo es una institución de carácter humanitario que existe desde los inicios de la historia de Occidente. En este caso, México califica si hay o no persecución política para el asilado y solicita al Estado donde se encuentra el salvoconducto. La Cancillería entrega ese documento y el asilado sale con la protección diplomática en donde se traslada y gozará de la protección de México".
Al preguntarle si ese tipo de asilo o de figura que se hace entre Mexico y Honduras sería un reconocimiento al gobierno de Roberto Micheletti, Pérez contestó que "
no necesariamente podría alguien pensar que es un reconocimiento tácito por el cruce de notas porque existió la peticion del Gobierno mexicano al hondureño; pero a mi juicio, siendo el carácter del asilo humanitario, se entiende que el Estado asilante lo hace por esas razones". Explicó que para el asilo se necesitan dos factores, uno que corra peligro la vida de la persona que pide asilo político y otra que sea un perseguido político. "
Pero esa calificación de si corre peligro el asilado o si es un perseguido político lo califica el Estado asilante. Honduras lo que hace es extender el salvoconducto".
En cuanto a las lImitantes o libertades de las que gozaría Zelaya al recibir el asilo político, Pérez indicó que la libertad principal será la que le conceda el Estado asilante que será la de la "
libre locomoción, circular libremente en todo el territorio mexicano o la limitación que también le pueda poner el Gobierno mexicano; pero generalmente hay libre circulación, puede vivir en México el tiempo que lo desee".
Pero las limitaciones son de orden político en el sentido que el viviendo en México no podrá realizar ningún tipo de actividad política que se relacione al Estado al cual se le concedió asilo. No se permite involucrarse en una política que pueda significar una confrontación con autoridades hondureñas, debe tener un perfil bajo en materia política. Al ser consultado en torno a que si Zelaya puede salir de México, el ex secretario de Relaciones Exteriores manifestó que sí puede con la autorizacion de México; pero una vez que sale de ese país está bajo su cuenta y riesgo y el asilo termina. Sería una decisión voluntaria donde escogería otro destino.
Explicó que hay una convención americana de asilo que regula a todos los Estados, pero se puede dar bilateralmente. En este caso no tiene que ser un tratado multilateral, de hecho Mexico tiene tradición de ser un Estado que brinda asilo a políticos de todas las ideologías.
En torno a cuál sería el trámite si el ex Presidente quiera regresar, Pérez dijo que si no lo hiciera de forma pública comprometería al Estado que le brindó asilo.
Convención sobre Asilo Territorial (Caracas, 1954)La Convención de Asilo Territorial de Caracas (Caracas 1954) con base en la que se hizo la petición de Manuel Zelaya establece en su artículo VIII que ningún Estado tiene el derecho de pedir a otro Estado que coarte a los asilados o refugiados políticos la libertad de reunión o asociación que la legislación interna de éste reconoce a todos los extranjeros dentro de su territorio, a menos que tales reuniones o asociaciones tengan por objeto promover el empleo de la fuerza o la violencia contra el Gobierno del Estado solicitante.
En el artículo IX establece que al requerimiento del Estado interesado, el que ha concedido el refugio o asilo, procederá a la vigilancia o a la internación hasta una distancia prudencial de sus fronteras, de aquellos refugiados o asilados políticos que fueren notoriamente dirigentes de un movimiento subversivo, así como de aquellos de quienes haya pruebas de que se disponen a incorporarse a él.
La determinación de la distancia prudencial de las fronteras para los efectos de la internación dependerá del criterio de las autoridades del Estado requerido.
Los gastos de toda índole que demande la internación de asilados o refugiados políticos serán por cuenta del Estado que la solicite.
El artículo X dice que los internados políticos, a que se refiere el artículo anterior, darán aviso al Gobierno del Estado en que se encuentran siempre que resuelvan salir del territorio. La salida les será concedida, bajo la condición de que no se dirigirán al país de su procedencia, y dando aviso al Gobierno interesado.